Catalunya inicia la tramitación de la modificación del reglamento de máquinas recreativas y de azar


Modificación que busca introducir una nueva máquina tipo “B” especial para salas de juego y bingos, que permita equiparar la oferta de Catalunya con la de otras CC.AA.

En concreto, el texto facilitado por la Generalitat de Catalunya comunica que “mientras en Cataluña existía la modalidad de juego, BINJOCS, coorganizada gestionada y comercializada por EAJA, en paralelo, el resto de comunidades autónomas desarrollaron diversas variantes de las máquinas recreativas, de tipo B, especiales para establecimientos de juego (bingos y salas de juego) denominadas en varios reglamentos o conocidas comercialmente como B1, B2, B3 y B4,etc., que actualmente están ya plenamente consolidadas dentro de la oferta de juego de la mayoría de comunidades autónomas”. 

Continúa el texto diciendo “Los modelos B1, B2 y otros similares, existentes en el resto de comunidades autónomas, son diferentes variantes de este tipo de máquinas de tipos B especiales, para salones de juego, bingos y casinos, que permiten abrir el abanico de variantes de este producto de juego. La denominación antes mencionada de estos modelos responde al siguiente planteamiento: B1 (quiere decir que la apuesta máxima es de 1 € y se puede obtener un premio máximo de 1.000€), B2 (la apuesta máxima es de 2€ y se puede obtener un premio máximo de 2.000,00€) y así sucesivamente, hasta la conocida como B6, en algunas CCAA, donde la apuesta máxima es de 6,00€ y el premio máximo 6.000,00€).

La retirada de los terminales de BINJOCS en Cataluña ha supuesto que las empresas autorizadas para explotarlas hayan perdido producto dentro de su oferta, y han de competir en desigualdad de condiciones con otras empresas del resto de comunidades autónomas que sí tienen esta oferta. Asimismo la desaparición de las máquinas de juego denominadas Binjocs ha comportado que la Administración de la Generalitat de Cataluña deje de ingresar el dinero que la explotación de esta modalidad de juego comportaba. 

Esta iniciativa quiere dar respuesta a las peticiones de los empresarios ante la situación de desigualdad de condiciones en qué se encuentran las empresas de juego catalanas dado que durante la época en que explotaron la modalidad del juego en terminales, BINJOCS, no se desarrollaron las nuevas variantes de las máquinas de tipo B, hecho que hoy provoca esta desventaja competitiva. 

Se calcula que la instalación de nuevas variantes de máquinas de tipos B especiales, como mínimo, podría comportar unos ingresos de 1.254.240,00€”.

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