Altadis alerta a La Rioja del peligro de la Ley Antitabaco
El director general de Altadis, Dominic Brisby, ha alertado al presidente de La Rioja, Pedro Sanz, de las consecuencias negativas para la región que se derivarían de la prohibición total del consumo de tabaco en lugares públicos. Brisby ha enviado a Sanz una carta en la que le manifiesta que la experiencia demuestra que «la insistente y asfixiante presión regulatoria contra el tabaco ha sido uno de los factores decisivos que ha obligado a llevar a cabo distintos procesos de reestructuración durante los últimos años».
El ejecutivo de Altadis, filial de Imperial Tobacco Group, añade que al «descenso constante» del mercado de cigarrillos, la creciente fiscalidad, el incremento de la presión regulatoria o la excesiva rigidez de las relaciones laborales, se uniría la repercusión negativa de la prohibición de fumar en todos los lugares públicos.
«Todos estos factores podrían poner en riesgo nuestro plan empresarial y podrían afectar seriamente al empleo de la planta de Logroño», advierte Brisby, quien avisa además sobre los efectos de la prohibición en sectores como la hostelería, el ocio y el turismo».
Dominic Brisby solicita al presidente del Gobierno regional que dirija al grupo parlamentario de su partido en el Congreso de los Diputados y al Gobierno de la Nación para manifestarle su preocupación por los perjuicios que esa medida podría acarrear a La Rioja.
Además le pide que «abogue por el cumplimiento de la Ley en las condiciones actuales, que respetan la libertad de elección de fumadores y no fumadores».
En un documento anexo a la carta, el director general de Altadis afirma que como consecuencia de la prohibición de fumar en lugares públicos, en el Reino Unido han cerrado 4.000 pubs y 40.000 trabajadores han perdido su empleo.
Según Brisby, en España el efecto sería aún mayor, dado que el número de restaurantes, cafés y bares es notablemente superior al del Reino Unido, por lo que la repercusión sería «devastadora».
Citando datos de la Federación Española de Hostelería, Dominic Brisby señala que la prohibición total de fumar provocará en España una caída de las ventas en restaurantes de un 7%, en bares y cafeterías entre un 10% y un 15%, en locales de ocio nocturno más del 20%.
La prohibición afectaría además a los sectores de Alimentación (café) y Bebidas (cerveza) y el de Vending, que dispone de unas 181.000 máquinas de tabaco, con un empleo asociado de unos 3.000 trabajadores.
Brisby recuerda que los ingresos por fiscalidad del tabaco representaron 9.451 millones de euros en 2009 -el 9,4% del total de los tributos de España- que el tabaco proporciona empleo directo a casi 50.000 personas y que supone el 1,2% del PIB nacional.
Fuente: abc.es