Aragón impulsa nueva reforma de la Ley del Juego

La Diputación General de Aragón ha impulsado una nueva reforma de la ley del juego –la tercera– en la que establece una nueva configuración para la apertura de casinos, limitada hasta ahora a uno estable por provincia y siempre que estuviera, al menos, a 40 kilómetros por carretera del más cercano, además de facultarse para regular las apuestas cibernéticas y telemáticas «cuando la actividad se desarrolle exclusivamente» en la comunidad.
El texto, cuya tramitación parlamentaria inició ayer la Mesa de las Cortes con su calificación, mantiene que la DGA «regulará el número máximo y la distribución geográfica de los casinos» y elimina la referencia al reglamento que debe regular «lo procedente para el establecimiento, autorización e instalación» de ese tipo de salas, que dejan de tener la obligación de operar «con tal denominación» y podrán, «en su caso, mediante pago», ofrecer «otros espectáculos o actividades complementarias».
El proyecto de ley añade varios juegos a la lista de los considerados «exclusivos» –la ruleta americana de doble cero, la ruleta de la fortuna y las «distintas modalidades» del póquer– y posibilita la apertura de una «sala de juego adicional» situada «fuera del inmueble o complejo» en el que se ubique el casino pero dentro del mismo término municipal. Esos salones –y los locales de temporada– quedan exentos de ofrecer como mínimo tres de las doce timbas específicas y de respetar las dimensiones mínimas de las salas principales de sus locales matriz: 250 metros cuadrados de superficie y aforo para 200 personas.
La autorización para la apertura de un casino seguirá efectuándose por concurso público, procedimiento al que el texto remitido a las Cortes añade como nuevas cuestiones a valorar: «el interés público del proyecto» y el «empleo que pueda generarse», además de matizar que la solvencia exigible a los promotores será «técnica y financiera». Se mantiene la obligatoriedad de que emita un informe el ayuntamiento del municipio donde fuera a instalarse y de respetar «los demás (requisitos) exigidos en las bases del concurso».
La remisión del texto a las Cortes causó sorpresa en medios parlamentarios, ya que los grupos desconocían su aprobación por el Consejo de Gobierno.
Algunas fuentes relacionaron la propuesta de reforma con la posibilidad de que la idea inicial de Gran Scala –un complejo de casinos y parques temáticos en Ontiñena– se viera redimensionada de forma que, al decrecer, no pudiera acogerse a la ley de Centros de Ocio de Alta Capacidad y quedara sin cobertura legal.
Por otro lado, el proyecto de reforma elimina la posibilidad «preconstitucional» de que «las entidades benéfico-deportivas, culturales, turísticas o asimiladas» puedan ser titulares de salas de bingo –y ceder su explotación–, posibilidad que queda reducida a sociedades que tengan esa actividad como la principal y cumplan requisitos como tener un capital social de 150.000 euros repartido en acciones nominativas.
Fuente: elperiodicodearagon.com

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