Comar se hace con el control de Gallega de Juegos S.A.

José Collazo

Según informa el medio economiadigital.es, Comar se ha hecho con el control de Gallega de Juegos SA, hasta ahora en manos del empresario vigués Alejandro Fernández Figueroa, afincado desde hace años en Brasil.

Fernández Figueroa pone fin con esta operación a uno de los últimos negocios que le quedaban en Galicia, los bingos y las salas recreativas, repartidos por Vigo y Pontevedra. La plantilla total de Gallega de Juegos que ahora pasa a depender del Grupo Comar es de algo más de cincuenta trabajadores al cierre de 2016. La empresa de Fernández Figueroa tenía su sede en la viguesa calle Policarpo Sanz, que ahora pasa a A Coruña, base de operaciones del holding de José Collazo.

Gallega de Juegos tenía hasta ahora como administrador único a Fernández Figueroa. La empresa había activado, de la mano del propio empresario vigués, una operación acordeón, de reducción de capital y posterior ampliación, por importe de 1,1 millón de euros. Fue inscrita en el Registro Mercantil el pasado 27 de febrero.

Posteriormente, a mediados de marzo, Fernández Figueroa convocó, como administrador único, una junta general de accionistas de Gallega de Juegos, celebrada en Vigo, y en la que se aprobaron las cuentas de la compañía correspondientes a 2016, con unas pérdidas reconocidas de 103.000 euros. Este resultado se vino a sumar a otros números rojos acumulados, que superan el millón de euros.

Este mismo mes, como último paso, Gallega de Juegos ha procedido a realizar una declaración de unipersonalidad, inscrita también en el Registro Mercantil, pasando a ser su socio único Comar Inversiones y Dirección de Empresas SL.

La operación conlleva el cese de Alejandro Fernández Figueroa como administrador único y la constitución de un consejo presidido por el dueño de Comar e integrado exclusivamente por miembros de su equipo.

Collazo integra en su grupo una empresa, Gallega de Juegos, que cerró 2016 con unos ingresos de 1,7 millones de euros y un resultado de explotación negativo superior a los 134.000 euros. Sin deuda bancaria, el principal pasivo de Gallega de Juegos, próximo al millón de euros, era con terceros.

Alejandro Fernández Figueroa es un empresario vigués afincado desde los noventa en Río de Janeiro. Desde allí impulsa diversos negocios relacionados con el ocio, y se le atribuye una sólida amistad con Pelé, el mito del fútbol carioca. En Vigo, Fernández Figueroa fue el impulsor de la sala Nova Olimpia, de gran éxito en la década de los ochenta.

Fuente: economiadigital.es