La legalización del juego en Brasil llega a un momento decisivo

bandeira-brasil
El proyecto actual ha quedado redactado con el máximo consenso posible y participación activa de todos los sectores interesados y afronta la próxima semana una etapa decisiva en su tramitación.

El proyecto del diputado Guilherme Mussi, del Partido Progresista (PP), que legaliza y regula las actividades de los casinos y salas de bingo en el país, incluyendo las operaciones en máquinas de videobingo, slots, apuestas y juegos en línea ya ha sido aprobado por el comité especial del marco regulador de los juegos de azar.

El comité especial del marco regulador para los juegos de azar aprobó Entre las medidas que incorpora, establece que las casas de juego estarán conectadas en línea a través de Internet con la agencia federal de recaudaciones y las máquinas de juego serán periciadas por una entidad competente de reconocimiento internacional.

El diputado del PP también expuso en el nuevo proyecto que el control sobre los juegos de azar será de carácter ininterrumpido. Si hay interrupción del flujo de la información acerca de las apuestas, el establecimiento será multado y podría ser penalizado con la cancelación de la concesión. Mussi incluyó una tasa del 15 por ciento sobre los ingresos de los apostadores, valor que será calculado sobre el total de los premios descontando los costos de registros e inscripciones.
La Cámara de Diputados informó que fueron más de diez meses de trabajo desde la instalación del cuerpo colegiado en octubre de 2015, con cinco textos de ley diferentes hasta llegar al aprobado, el cual seguirá siendo analizado en el Plenario la próxima semana. El portavoz de la comisión dijo que se analizaron 17 proyectos de ley sobre este asunto y que se les pidieron sugerencias a representantes de casinos de Portugal y Estados Unidos, a las entidades civiles en contra y a favor del juego, a miembros del Ministerio Público, del Consejo de Control de Actividades Financieras, de las loterías estatales, la Casa Económica Federal y a especialistas en la industria, para darle sustento al cuerpo de la ley.

Mussi dijo que se tuvieron que hacer concesiones, incluso cuando se pensaba de manera diferente, siempre en pos de respetar en pensamiento de la mayoría y tratar de construir para que la ley saliera “lo más redonda posible para llegar de esa manera la plenario”. Por su parte, el diputado João Carlos Bacelar del Partido da República (PR), dijo que la discusión debe darse en el marco de los millones de puestos de trabajo que se van a crear.

El proyecto de ley de Diputados autoriza el funcionamiento de las salas de bingo en locales propios, en los jockeys Clubs y en los estadios de fútbol con capacidad para 15 mil personas. La propuesta también permite que los estados creen sus propias loterías, cuestión que está prohibida desde 1967. De esta manera, el Estado interesado deberá crear los órganos específicos para su funcionamiento o concesionar por 20 años a la iniciativa privada.

Corresponde a los municipios autorizar el funcionamiento de las salas de bingo, pero el Jogo do Bicho será responsabilidad de los estados. El proyecto no establece el número máximo de salas de bingo que se instalen en una ciudad, solo determina que no pueden estar a menos de 1 km el uno del otro ni a menos de 5 km de los casinos. Cabe destacar que la superficie de los bingos se redujo de los 1500 m2 iniciales a 500.

El proyecto establece que las máquinas de videobingo solo funcionen en los casinos, bingos y estadios de fútbol y las tragamonedas, unicamente en los casinos. Ahora, la labor de Mussi se centra en seguir reuniéndose con los senadores para llegar a un consenso y que el texto también sea aprobado en ese cuerpo.

Ambos proyectos tienen diferencias, ya que en el senado legaliza apenas el Jogo do Bicho, casinos y bingos en sus modelos presencial y online. Además de eso, difiere en el tema de la tributación, ya que los senadores apuestan a cobrar una contribución social sobre los ingresos brutos del 10 por ciento en las salas de juego y de un 20 por ciento en los juegos online. El proyecto de diputados no contempla estos cánones.

El proyecto del senado, además, obliga a las instituciones a identificar a los jugadores, mientras que diputados no hace ninguna referencia a este tema. También, los senadores limitan el número de salas de bingos a una cada 250 mil habitantes, con la excepción del Distrito Federal, en donde se permitiría una cada 150 mil personas.

Fuente: eldiario.deljuego.com