Los casinos de Macao, un buen indicador del estado de salud de la economía china
Al igual que ocurrió en España, donde el sector en su conjunto cayó en los años de crisis, los beneficios empresariales de los operadores de Macao revelan una tendencia a la baja en los últimos 12 meses, si bien no es un desplome como tal.
La economía global lleva meses en vilo por la guerra comercial entre Estados Unidos y China. La incertidumbre sobre sus efectos ha arrastrado el sentimiento inversor hacia la cautela, pero aún es pronto para poder cuantificar con claridad el impacto en el PIB mundial. Ahora bien, hay indicadores que sirven como pista para determinar que las cosas en China no van tan bien como afirman las cifras oficiales.
El país, junto a otras potencias asiáticas, llevan tiempo sintiendo la presión del comercio más débil así como una menor demanda de producción tecnológica. Esa ralentización, apuntan desde Schroders, se refleja en los recibos de los casinos de Macau, en China.
“Los beneficios empresariales de los casinos en Macau son un buen indicador de los ingresos y actividad por consumo”, explica Emma Stevenson, en un reciente estudio para la gestora. Macau es el único lugar en China donde los juegos de apuestas están permitidos. Los casinos reportan sus cuentas mensualmente y los expertos interpretan estos datos como bastante fiables. Por eso, “como las cifras de PIB oficiales en China se leen con bastante escepticismo, las cuentas pueden ser una alternativa para encontrar cambios en el ciclo de negocio”, añade la experta.
Como se aprecia en el gráfico, los beneficios empresariales de las casas de apuestas chinas revelan una tendencia a la baja en los últimos 12 meses, si bien no es un desplome como tal. Así, la gestora no ha revisado sus perspectivas de crecimiento inmediato para el país. El equipo económico de la firma ha había rebajado sus previsiones para 2019 en agosto “para incorporar una escalada a escala máxima de la guerra comercial entre Estados Unidos y China”.
Donde sí han revisado sus estimaciones ha sido en la divisa. “Ahora esperamos una depreciación mayor del renminbi frente al dólar, incluso en un entorno de mayor debilidad para la divisa norteamericana”, afirma Craig Botham, economista de mercados emergentes de Schroders.
