«Gran Scala no está muerto, pero se retrasa hasta principios de 2014».
Entrevista a Frédéric Bouvard. El promotor asegura que el consorcio no desiste de instalarse en los Monegros y que el proyecto se entregará al Gobierno aragonés en mayo.
Hace más de dos años que se presentó por todo lo alto Gran Scala. En estas fechas, debería haber ya obras en Monegros. ¿Cuál es el problema?
Todo marcha bien. Cuando se inicia y se desarrolla un proyecto forzosamente surgen problemas, pero teniendo en cuenta la envergadura de este, podemos decir que todo va bien. Podemos estar satisfechos, no al cien por cien, porque siempre nos gustaría que todo fuera más rápido. Pero hace falta hacer bien el trabajo, profesionalmente, y eso lleva su tiempo.
Tanto retraso hace que mucha gente tema que el proyecto esté muerto.
No, no. El proyecto no está muerto. Pero es normal que haya gente que sea escéptica o, incluso, se oponga. Cuando Walt Disney creó Disneyland, sucedió lo mismo. Es lo habitual. Pero no hay razones para creer eso.
¿ILD ha pensado en algún momento en desistir, en renunciar a instalarse en Aragón?
Absolutamente, no. Todo lo contrario. Lo más difícil, ya lo hemos conseguido. Hemos comprado los terrenos y el Gobierno ha aprobado la ley para desarrollar nuestro proyecto. Ahora mismo, todo lo que necesitamos para avanzar, lo estamos haciendo.
¿Se sigue trabajando, entonces?
Claro. Estamos desarrollando varios estudios, que son complicados. Por ejemplo, una vez hemos dispuesto del de la orografía del terreno, hemos adaptado el master plan y hemos modificado nuestros planes iniciales. Ahora mismo, estamos trabajando en los detalles técnicos. Estamos obligados a hacer las cosas bien. Estamos pendientes también de otros estudios de energía, categorías de empleo
¿El consorcio mantiene contactos aún con la DGA?
Desde luego. Recientemente hemos hecho una presentación al consejero de Industria.
Entonces, ¿ILD sigue interesado en levantar el complejo de ocio y juego en los Monegros?
No es que sigamos interesados, es que estamos más interesados que hace dos años, pero menos de lo que estaremos en seis meses. Si hemos invertido dinero y tiempo no es para desistir cuando todo está a punto de arrancar.
El Gobierno aprobó el año pasado una ley muy estricta para la instalación de Gran Scala. ¿Será ILD capaz de cumplir todos las requisitos que exige la norma, entre ellos, tres mil empleos, un terreno de mil hectáreas, y ocho mil habitaciones de hotel?
No va a haber problemas. Los empleos responden al tamaño del complejo y están calculados más o menos para responder a las necesidades de un proyecto de este tipo. No es que la ley sea muy estricta en estas condiciones. Es simplemente realista de acuerdo a la magnitud del proyecto.
También se exige un primer aval de tres millones, al que le seguirá otro de seis.
No tenemos ningún problema en ese sentido. La parte financiera está asegurada.
¿Disponen de financiación, a pesar de la crisis económica?
La garantía que nos exige el Gobierno no es una suma importante en el conjunto del proyecto.
Pero la crisis sí habrá afectado a la captación de inversores.
Es cierto que la crisis ha hecho daño, pero también nos ha beneficiado. Ha hecho que el proyecto de Dubailand, nuestro principal competidor, se haya parado. Y los inversores interesados en ese complejo ahora nos miran a nosotros. Además, y aunque pueda parecer sorprendente, 2009 ha sido un año excelente en España para el sector.
¿El nuevo diseño del complejo ha reducido su tamaño?
No, no, en absoluto. Es solo una reorganización. Se ha eliminado la disposición inicial en forma de círculo y se ha dispuesto todo alrededor de una gran calle central que atravesará el complejo de punta a punta.
Pero el centro abriría solo con 8 casinos y tres parques, cuando en un principio se habló de muchos más. ¿Hay problemas para encontrar operadores?
El número de casinos sigue en discusión, pero lo cierto es que va a haber 8.000 máquinas. Da igual que sean 5, 8 o 12 establecimientos. Además, estamos avanzando muy bien en este campo. En pocas semanas vamos a firmar acuerdos importantes.
Va a haber tres parques temáticos, pero muy potentes. Estamos seleccionando a grandes marcas. Se trata de firmas de alto nivel. El dedicado al cine va a ser de referencia no solo europea, sino mundial.
¿Están negociando con la Paramount?
Estamos en negociaciones con un gran estudio de Hollywood. Pero por ahora no podemos decir más que la marca del parque de cine será un gran estudio.
A estas alturas, ¿aún no hay ningún acuerdo cerrado con ningún operador?
No, tenemos preacuerdos. Hay marcas que han dejado claro su interés en instalarse y están desarrollando ahora su proyecto. Cuando hayan terminado, nos pondremos de acuerdo sobre el tipo de inversión, su implantación… y firmaremos el contrato definitivo.
¿Cuándo tienen previsto presentar el proyecto, toda la documentación al Gobierno?
Confiamos en que sea en el mes de mayo. Acabamos de terminar el masterplan preliminar y estamos haciendo ahora los estudios de impacto ambiental para redactar el proyecto.
El consorcio ha pagado ya dos plazos para reservar los terrenos de Ontiñena. ¿Se va a comprar más suelo a particulares?
No vamos a comprar más por el momento, porque no lo necesitamos inmediatamente.
¿Volverán a abonar otra cantidad en junio, aunque el proyecto continúe sin despegar?
De acuerdo a los acuerdos que firmamos en su día, seguiremos pagando los plazos. En un principio, también había gente que decía que no compraríamos el suelo, que no pagaríamos y la realidad ha demostrado que se equivocaban.
ILD alquiló unas oficinas enormes en Zaragoza. Pero están vacías. Nadie trabaja allí.
Cada miembro del consorcio trabaja allá donde es más efectivo. Ahora mismo no tenemos necesidad de trabajar físicamente sobre el terreno.
Reiteradamente, se han incumplido las previsiones de inicio de las obras. ¿Se atreve a dar un nuevo plazo?
Si pudiéramos arrancar en otoño sería perfecto. Pero todo depende, de nuevo, de la velocidad a la que puedan hacerse los estudios. Las obras solo pueden comenzar cuando estén concluidos los trabajos. Ellos nos permitirán saber qué hay que hacer exactamente, qué movimientos de tierras… etc.
¿Cuándo abriría el complejo?
Ahora, 2012 es claramente imposible. Lo más creíble sería principios de 2014, pero dependerá de las dificultades técnicas que nos podamos encontrar durante las obras.
Fuente: Heraldo.es