La única forma para superar la crisis es seguir invirtiendo y aumentar la oferta

Juan Padrón está a punto de cumplir el sueño de su vida: trasladar el Gran Casino a la zona del parque Santa Catalina después de 22 años de espera y varias posibles ubicaciones que se han ido frustrando una tras otra.

Después de 22 años, el Casino Las Palmas está a punto de trasladarse a la zona del Parque Santa Catalina, ¿qué avatares han pasado para conseguirlo?

 

– Ha sido una lucha tremenda. Desde ese entonces estamos intentando trasladarnos a la zona del Puerto pero no veíamos el sitio adecuado. El primer lugar que buscamos fue Elder y Miller, después la antigua Casa Ford y posteriormente la estación del jet foil hasta que por fin hemos comprado un amplio local en los bajos del edificio Saba, donde creemos que estamos en el sitio ideal para potenciar el casino y el entorno portuario.

– ¿Cómo le ha afectado al Casino estar tantos años en el hotel Santa Catalina?

– Nos ha afectado claramente. Yo concursé en su momento por el casino para tenerlo en la zona del Puerto y no aquí, porque ésta es una ubicación que está muy bien para el hotel pero no para un casino porque no da a la calle y la gente no sabe que existe, sobre todo los turistas que llegan a la ciudad a través de los cruceros y todos los que nos visitan. Después de 22 años estamos en el buen camino y va a cumplirse la ilusión que he tenido siempre. Hemos conseguido un local idóneo de 1.400 metros frente a los más de 800 que teníamos hasta ahora, también habrá un bonito restaurante, más juegos y más personal ya que habrán hasta 150 personas trabajando. El Casino será un precedente de mi trabajo en esta vida. Cualquier casino del mundo tiene lo que tenemos nosotros, vamos a poner máquinas de última generación y estamos en la vanguardia del juego.

– ¿La crisis ha agravado la situación del casino?

– La crisis es tremenda y si nos tuviésemos que quedar aquí íbamos a un cierre anunciado y obligatorio porque llevamos tres años perdiendo dinero y cada año se multiplican las pérdidas. La única forma de seguir adelante es invertir porque en las grandes crisis hay grandes oportunidades y por trabajar no me voy a arruinar.

– Pero la recesión sí ha afectado al sector del juego en general.

– Es una burrada. Yo tenía más de 40 salones de juego y este año he cerrado ya diez. Tenía 1.450 personas trabajando y he bajado a 1.200 y creo que ahí me voy a quedar. Tengo que recordar que mi empresa es la mayor contribuyente a Hacienda con algo más de 12 millones de euros al año.

– ¿Los clientes habituales de los casinos siguen siendo de alto poder adquisitivo a pesar de la crisis?

– Sigue habiendo mucho poder adquisitivo en el mundo, lo que pasa es que hay que buscar a esas personas y traerlas hasta Gran Canaria. Hay gente que tiene dinero pero a veces no sabe ni donde gastárselo y se van a Las Vegas o a Macao buscando el ocio y el juego. Tenemos lo mejor del mundo para atraer a estos jugadores pero lo que hace falta es invertir y darnos a conocer más. Hay que tener más oferta para que la gente venga y genere riqueza.

– El Gobierno va a aprobar una nueva Ley del Juego para Canarias, ¿está consensuada con el sector?

– El Gobierno ha contado con nosotros porque tenemos la experiencia suficiente. Por eso se está haciendo una Ley del Juego que es la que le hacía falta a Canarias porque ya en el resto de España la tienen, hemos sugerido cosas, el Gobierno las ha estudiado y por eso creo que va a aprobarse una ley acorde con los tiempos en los que estamos.

– Una vez que el Casino pase a su nueva ubicación, ¿qué uso se le dará al espacio que ocupa ahora en el hotel?

– El espacio que ocupa ahora el Casino va a suponer cuando se traslade incrementar la oferta del hotel Santa Catalina con un nuevo salón. Este es un sitio emblemático para Las Palmas de Gran Canaria y algunas veces nos falta espacio para atender la demanda de eventos que se nos pide, queremos llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento para incorporar esta zona al hotel y gestionarlo junto con el resto del establecimiento.

– ¿Cómo están ahora sus relaciones con el Ayuntamiento después de las diferencias que han existido en el pasado por la gestión y arrendamiento del hotel?

– El Ayuntamiento está entendiendo la situación por la que atravesamos y nos está dando todas las facilidades del mundo.
Cuando cogí las riendas del hotel era para 20 años y me comprometí a invertir 6 millones de euros, pero con los años empecé a descubrir que había más agujeros que tapar de los que yo creí y la inversión se disparó a más de 16 millones (2.600 millones de las extintas pesetas). El Ayuntamiento reconoció la labor que había hecho y me concedieron tres años más de gestión, por lo que tengo el arrendamiento hasta el año 2017. El hotel ha adquirido el prestigio que antes no tenía con piscina, garaje, aire acondicionado, nuevas cocinas, etcétera.

– ¿Va a seguir mejorando el hotel con nuevas inversiones?

– El hotel está siempre en mi corazón y es una joya dentro de mi empresa. El listón siguen siendo alto para todos los que nos visitan porque por aquí han pasado todo tipo de personas ilustres. Hay hoteles buenos pero el Santa Catalina marca la diferencia, lo importante es sumar y entre más inversión turística haya es mucho mejor para todos. El hotel no se llegó a terminar nunca cuando se hizo porque tenía que llevar cuatro alas y hay tres porque una nunca se terminó. Algún día finalizaremos la torre que falta y si llegamos a una ampliación de contrato con el Ayuntamiento esperamos terminar con el proyecto original. Hace unos tres años invertimos 400 millones de las antiguas pesetas para renovar las habitaciones.

– ¿Cree que saldremos de la crisis mejor que antes o seguiremos igual?

– La crisis no tiene la solución detrás de la puerta pero creo que estamos aprendiendo de ella y vamos tomando suficiente fondo para salir más fortalecidos. También es bueno reformar las leyes porque es positivo que haya leyes pero también que se cambien para adaptarse a la situación y que podamos seguir adelante.

Fuente:laprovincia.es

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